Usar emojis es toda una ciencia. Si usas demasiados puedes parecer infantil e inclusive un loco, pero si usas pocos podrías llegar a ser considerado serio o aburrido. En realidad no es tan fácil como parece, ¿o si?
¡La ciencia tiene la respuesta a tus dudas!
Investigadores del Instituto Kinsey, analizaron a 5.000 personas y los resultados fueron contundentes. Los usuarios que usaron más emojis en sus conversaciones online no sólo tuvieron más citas, sino también más relaciones.
Gracias a aplicaciones como Tinder, las conversaciones escritas han tomado muchísimo protagonismo al momento de encontrar pareja. Viéndolo así, los emojis pueden ayudar, y mucho.
El estudio demostró que el aumento de uso de emojis afectaba de manera positiva la relación. No se relacionaba directamente con el número de las primeras citas, sino con el de la segunda cita. Los usuarios que usaban emojis tenían más chance de dar un beso, tener relaciones o hasta comenzar una relación.
De los 5.000 participantes, 86.8% se consideraba hetero-sexual, y el 62.2% se identificó como blanco/caucásico. No se pudo revelar la causa exacta a través de este estudio, pero si demostraron la relación que existe entre los emojis y el sexo.
El estudio declaró que “El uso de los emojis permite a los usuarios expresar información afectiva importante a sus potenciales parejas. Y esto facilita la conexión entre estas de una manera más romántica y sexual”.
“Esto sugiere que las personas que usan más emojis bajo este contexto son más exitosos estableciendo conexiones, lo que aumentará sus probabilidades para encontrar una pareja romántica o sexual”.
El estudio tuvo sus limitantes, y es que los investigadores nunca tomaron nota de “qué emojis se usaron” o “bajo que situaciones lo usaron”.
“No podemos saber cuales emoticones son más efectivos que otros, y cuales generan los lazos de manera más rápida” admitió el instituto Kinsey.
Aun así, sabemos que en una primera cita no llenarás un chat de berenjenas, por ejemplo 😉 Queda esperar nuevos estudios que aclaren, todo sea por el bien de la ciencia.